El consumo de carne pierde protagonismo entre los alemanes. Una tendencia que conduce al incremento de alternativas vegetarianas. El consumo de productos cárnicos y embutidos ha disminuido en Alemania.

En 2015, la carne estaba presente en la mesa del 34% de los ciudadanos. En 2021, el porcentaje ha caído al 26%. Los hombres comen más carne que las mujeres. A diario, el 33% de los hombres apuestan por la carne mientras que solo el 18% de las mujeres consumen carne.

Los vegetarianos crecen en Alemania. De hecho, el consumo productos sustitutos vegetales se ha hecho popular. Los jóvenes entre 19 y 29 años recurren a alternativas vegetarianas. El consumo de alimentos regionales es fundamental para el 82% de los alemanes. Especialmente en el caso de los huevos y las frutas y hortalizas. El 46% de los jóvenes de 14 a 29 años también cree que la carne producida en un laboratorio podría ser una buena solución para abastecer de alimentos a la población mundial.

El 73% de los alemanes considera que el bienestar de los animales de cría es importante. Por ello, el 86% apoya la introducción de la etiqueta de bienestar animal prevista por el Gobierno. La indicación de que un producto proviene de practicas respetuosas del bienestar animal es incluso más importante que la impresión de la fecha de consumo preferente de alimentos.