Como ejemplo, el tomate comercializado entre las semanas 5 y 7 es un 22% menos que el vendido las mismas fechas del año 2022. El pepino experimenta un descenso en la producción del 21%, pimiento y berenjena superan el 25%.
Las carencias de producción comienzan a ser preocupantes para algunas empresas que ven como tienen problemas para cumplir con los programas contratados con sus clientes. Los números no salen a pesar de las elevadas cotizaciones de estas semanas.
Los agricultores ingresan más por kilo, pero la reducción del volumen de producción tan elevada no es compensada por el precio. A esto, el agricultor ve con preocupación cómo los costes de producción siguen creciendo y como la locura del clima acarrea dificultades con las plagas o virosis.
Como ejemplo, el tomate comercializado entre las semanas 5 y 7 es un 22% menos que el vendido las mismas fechas del año 2022. El pepino experimenta un descenso en la producción del 21%, pimiento y berenjena superan el 25%.
Las carencias de producción comienzan a ser preocupantes para algunas empresas que ven como tienen problemas para cumplir con los programas contratados con sus clientes. Los números no salen a pesar de las elevadas cotizaciones de estas semanas.
Los agricultores ingresan más por kilo, pero la reducción del volumen de producción tan elevada no es compensada por el precio. A esto, el agricultor ve con preocupación cómo los costes de producción siguen creciendo y como la locura del clima acarrea dificultades con las plagas o virosis.