En este panorama, con la inflación en el 10.2% -el dato más elevado en 37 años-, los analistas observan que el consumidor tiene un comportamiento de crisis. Es decir, está reduciendo el gasto mediante una dinámica de aumento de la frecuencia de compra. Una actitud que está lastrando la distribución alimentaria.
La subida de costes, el aumento del precio de la energía y la guerra en Ucrania están marcando a la distribución alimentaria. La patronal alude a su responsabilidad para la contención de costes y ajustar sus márgenes para que no impacten en el consumidor. Es más, se solicita que se ajusten los impuestos indirectos para que los consumidores se beneficien de unos precios más bajos.
En este panorama, con la inflación en el 10.2% -el dato más elevado en 37 años-, los analistas observan que el consumidor tiene un comportamiento de crisis. Es decir, está reduciendo el gasto mediante una dinámica de aumento de la frecuencia de compra. Una actitud que está lastrando la distribución alimentaria.
La subida de costes, el aumento del precio de la energía y la guerra en Ucrania están marcando a la distribución alimentaria. La patronal alude a su responsabilidad para la contención de costes y ajustar sus márgenes para que no impacten en el consumidor. Es más, se solicita que se ajusten los impuestos indirectos para que los consumidores se beneficien de unos precios más bajos.