La agroindustria se enfrenta a constantes retos más allá de la presión de los mercados y competencia.

La agricultura vertical ha irrumpido con una fortaleza  considerado un millonario negocio de las frutas y verduras futuristas que crece en las ciudades.  

La agricultura vertical, un sector colonizado por emprendedores tecnológicos puede conducir  a la producción de alimentos a dar un salto disruptivo. Emprendedores como Jeff Bezos o Softbank están en la carrera desde hace años. Las claves son: consumo de menos espacio, pesticidas, agua y nutrientes, aparición de menos  plagas y mayor rendimiento del cultivo. El espacio es un lugar cerrado que  puede estar cerca de las ciudades. Son entornos controlados con luz artificial.

En España, Groots,  startups que apuesta por este modelo de plantaciones, solo ve ventajas. Este tipo de plantaciones garantiza la producción los 365 del año. Se produce con un 98% menos de emisiones de CO2. En una finca-nave de 300m2 se puede conseguir la misma producción que en 1.2 hectáreas de cultivo tradicional. En New Jersey  se encuentra la granja de agricultura vertical más grande del mundo.