Con un 100% de empleabilidad, la carrera de ingeniería agrónoma convive con la imposibilidad de completar plazas en las aulas. Desde 2005, los datos reflejan un descenso de los matriculados en másteres y carreras del sector agro, situados en el curso 2021-2022 en 2.299. Cambio de mentalidad de las empresas del sector.

Aumento en la demanda de perfiles técnicos, que son necesarios tanto en las compañías que desarrollan la tecnología como las que la adquieren e implementan. Factores que han provocado un cambio en algunos de los conocimientos que se imparten en los másteres y que permitirán a los estudiantes operar en todos los eslabones de la cadena agroalimentaria: satélites, big data, machine learning, agricultura de precisión, programación y modificación genética.