Los productos hortofrutícolas que llegan a España de terceros países tienen condiciones distintas a los producidos dentro de la UE.

Los agricultores han pedido en sus manifestaciones que se retiren los acuerdos comerciales como el que se negocia con el Mercosur. Así, las asociaciones agrarias (COAG y UPA) exigen que se apliquen las mismas condiciones en materia medioambiental o de derechos laborales a las producciones de países extracomunitarios. Los siete primeros países fuera de la UE dese donde España importa son Brasil, Marruecos, China, Estados Unidos, Argentina e Indonesia, todos ellos con unas ventas a España superiores a los 1.000 millones de euros. En relación a las condiciones laborales, los dos primeros importadores por volumen tienen un menor salario mínimo que España, Brasil con 217 euros al mes y Marruecos superó los 215 euros al mes. De esta manera, no tiene el mismo coste producir un tomate en Brasil o Marruecos que en España.

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