La nueva maestra de este delicioso producto estrella de la huerta navarra ha tenido que superar un arduo proceso para alzarse con este galardón. En la primera fase, 50 alumnos de escuelas de hostelería de toda España presentaron sus tapas, de las que 8 resultaron elegidas. Estos finalistas han defendido hoy sus propuestas ante un jurado profesional en Madrid, en un concurso en directo lleno de nervios pero también de creatividad. “Con mi tapa he querido fundir la tradición de mi tierra con mi pasión, la repostería”,ha declarado la estudiante del IES Gregorio Prieto de Valdepeñas (Ciudad Real).
El jurado encargado de valorar las tapas ha estado presidido por el televisivo chef Sergio Fernández, quien además ha hecho las veces de maestro de ceremonias. La también chef María Jiménez Latorre y el presidente del Consejo Regulador de la DOP Pimiento del Piquillo de Lodosa, Jesús Aguirre, fueron los otros dos miembros de un tribunal que no lo ha tenido nada fácil ala hora de decidir. De hecho, Sergio Fernández se ha mostrado sorprendido por la calidad de las propuestas en esta edición: “Cada vez es mayor la originalidad y la habilidad con la que los participantes casan el pimiento del piquillo con ingredientes tradicionales e innovadores”. María Jiménez Latorre, por su lado, ha destacado “la profesionalidad con la que estos estudiantes, chicas y chicos jóvenes, han defendido sus tapas ante el jurado”.
Iniciado en 2019, este año marca la cuarta edición del Master de Tapas de Pimiento del Piquillo de Lodosa. “El concurso es una apuesta muy fuerte para un Consejo Regulador pequeño como el nuestro, pero nos llena de satisfacción la respuesta de las escuelas, con un nivel que se va superando año tras año”ha subrayado Jesús Aguirre.
Además de Cristina Mellado, el resto de participantes en la final fueron: Andrea Collantes Iturri, del IES Peña castillo de Santander (Cantabria); Ginés Vivo Sáez, del IES HotelEscuela de Madrid; Sebastián Alejandro Carvajal Faundez, del CIFP Nº1 de Guadalajara; Alba Pineda Arbaizar, del ITM Miranda de Miranda de Ebro (Burgos); Josefina Toledo Tudela, de la escuela Altaviana de Valencia; David Carrilero Fernández, de la Universidad Laboral de Albacete y Oier Erro, del CI Burlada (Navarra).
El objetivo de todo este Máster es dar a conocer el ‘oro rojo’ navarro. Por ello,durante el concurso, el presidente del ConsejoRegulador, Jesús Aguirre, ha destacado la calidad de la cadena de valor de este producto: “Sólo los ejemplarescultivados con esmero, recolectados en su punto justo de madurez, asados a lallama y pelados en seco pueden ser pimientos del Piquillo de Lodosa”.No en vano, ha conseguido una Denominación de Origen Protegida que incluye exclusivamentea los recolectados en los municipios de Andosilla, Azagra, Cárcar, Lerín, Lodosa, Mendavia, San Adrián y Sartaguda, en el suroeste de Navarra.
LaDOP ampara tanto la conserva de pimientos enteros como las tiras y los pimientos en bandeja elaborados en esos ocho municipios. La máxima calidad de esta hortaliza está reconocida por la Unión Europea mediante la concesión de esaDenominación de Origen, con los exigentes requisitos de trazabilidad que ello conlleva.
La nueva maestra de este delicioso producto estrella de la huerta navarra ha tenido que superar un arduo proceso para alzarse con este galardón. En la primera fase, 50 alumnos de escuelas de hostelería de toda España presentaron sus tapas, de las que 8 resultaron elegidas. Estos finalistas han defendido hoy sus propuestas ante un jurado profesional en Madrid, en un concurso en directo lleno de nervios pero también de creatividad. “Con mi tapa he querido fundir la tradición de mi tierra con mi pasión, la repostería”,ha declarado la estudiante del IES Gregorio Prieto de Valdepeñas (Ciudad Real).
El jurado encargado de valorar las tapas ha estado presidido por el televisivo chef Sergio Fernández, quien además ha hecho las veces de maestro de ceremonias. La también chef María Jiménez Latorre y el presidente del Consejo Regulador de la DOP Pimiento del Piquillo de Lodosa, Jesús Aguirre, fueron los otros dos miembros de un tribunal que no lo ha tenido nada fácil ala hora de decidir. De hecho, Sergio Fernández se ha mostrado sorprendido por la calidad de las propuestas en esta edición: “Cada vez es mayor la originalidad y la habilidad con la que los participantes casan el pimiento del piquillo con ingredientes tradicionales e innovadores”. María Jiménez Latorre, por su lado, ha destacado “la profesionalidad con la que estos estudiantes, chicas y chicos jóvenes, han defendido sus tapas ante el jurado”.
Iniciado en 2019, este año marca la cuarta edición del Master de Tapas de Pimiento del Piquillo de Lodosa. “El concurso es una apuesta muy fuerte para un Consejo Regulador pequeño como el nuestro, pero nos llena de satisfacción la respuesta de las escuelas, con un nivel que se va superando año tras año”ha subrayado Jesús Aguirre.
Además de Cristina Mellado, el resto de participantes en la final fueron: Andrea Collantes Iturri, del IES Peña castillo de Santander (Cantabria); Ginés Vivo Sáez, del IES HotelEscuela de Madrid; Sebastián Alejandro Carvajal Faundez, del CIFP Nº1 de Guadalajara; Alba Pineda Arbaizar, del ITM Miranda de Miranda de Ebro (Burgos); Josefina Toledo Tudela, de la escuela Altaviana de Valencia; David Carrilero Fernández, de la Universidad Laboral de Albacete y Oier Erro, del CI Burlada (Navarra).
El objetivo de todo este Máster es dar a conocer el ‘oro rojo’ navarro. Por ello,durante el concurso, el presidente del ConsejoRegulador, Jesús Aguirre, ha destacado la calidad de la cadena de valor de este producto: “Sólo los ejemplarescultivados con esmero, recolectados en su punto justo de madurez, asados a lallama y pelados en seco pueden ser pimientos del Piquillo de Lodosa”.No en vano, ha conseguido una Denominación de Origen Protegida que incluye exclusivamentea los recolectados en los municipios de Andosilla, Azagra, Cárcar, Lerín, Lodosa, Mendavia, San Adrián y Sartaguda, en el suroeste de Navarra.
LaDOP ampara tanto la conserva de pimientos enteros como las tiras y los pimientos en bandeja elaborados en esos ocho municipios. La máxima calidad de esta hortaliza está reconocida por la Unión Europea mediante la concesión de esaDenominación de Origen, con los exigentes requisitos de trazabilidad que ello conlleva.